Uno - Plaza Mayor de Salamanca

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(de visita obligada)

De todas las plazas mayores de España, la de Salamanca supera en belleza a las demás consiguiendo atrapar a todos los que la visitan. Situada en el corazón del centro histórico de la ciudad, empezó a construirse en 1729 por Alberto Churriguera a petición del corregidor Rodrigo Caballero y Llanes. Con su proyecto buscaba acabar con el caos que sufría en ese momento la plaza para construir un espacio llamativo que ordenara el comercio y fuera escenario de festejos. De estilo barroco, aparece presidida por el Ayuntamiento y de su espectacular fachada destacan los medallones; pero, ¿por qué? Pues bien, Churriguera se inspiró en el Palacio Real de Madrid para situar, a una altura visible, retratos de personajes ilustres de la época. Además, se encargó de jugar con las luces y sombras, dar color a los balcones y decidir el tipo de arco de cada portal. 

Exposición de Miquel Barceló - 2017
Una vez acabados el Pabellón Real (este) y el de San Martín (sur), Manuel de Larra
Churriguera va a colaborar con su tío, y su principal aportación fue girar la calle Zamora con el objetivo de que esta desembocara hasta la plaza en ángulo recto. Sin embargo, existían varios problemas técnicos que hicieron que su construcción fuera terminada por Andrés García de Quiñones en 1755. Así que, ¿cómo se las ingenió este arquitecto para solucionarlos? Por ejemplo: estrechó el Ayuntamiento debido a que su tamaño inicial afectaba a muchas propiedades privadas; cambió los arcos que tenían doble altura para cumplir con las nuevas órdenes del Consejo de Castilla; o resolvió el problema de la calle del Concejo permitiendo así el paso de los carruajes.

Considerada la quinta plaza más grande de España con 6.400 metros cuadrados, forma un cuadrilátero irregular soportalado, de tres pisos en cada fachada. De hecho, el escritor Miguel de Unamuno se refería a ella como “cuadrilátero irregular, pero asombrosamente armónico”. Tiene 88 pórticos de medio punto sobre fuertes pilares, con medallones tallados en piedra franca que parecen de mármol por estar pintados en blanco. Estos medallones se distribuyen temáticamente según la zona: en el Pabellón Real se representan a monarcas españoles, donde destaca la efigie del rey Fernando III El Santo. En el pabellón de San Martín aparecen ilustres militares o conquistadores, mientras que en el pabellón de petrineros encontramos a personajes de la cultura.

Fuente: historiacivil.files.wordpress.com

La Plaza Mayor de Salamanca pertenece a la tipología de plaza tradicional castellana, como las de Valladolid, Madrid o Córdoba. Pero, a diferencia de estas, renacentista la de Valladolid, herreriana la de Madrid y barroca la de Córdoba, el estilo de la de Salamanca corresponde al barroco tardío. Aunque la Plaza Mayor de Madrid sirvió de prototipo a la de Salamanca, lo cierto es que, por una serie de características arquitectónicas y por lo tardío de su fecha, la Plaza de la Corredera de Córdoba es la que más se parece a la salmantina.

¿Qué importancia tiene aquí la plaza de Valladolid? A partir del siglo XVI se va a convertir en el modelo de las demás plazas españolas e hispanoamericanas tras ser la primera plaza monumental. Por tanto, su estructura ha sido copiada en otras ciudades, entre ellas Madrid y Salamanca, debido a que presenta las características propias de una plaza mayor. Estas particularidades se resumen en la presencia de un Ayuntamiento y la regularidad de sus fachadas, con soportales adintelados y tres alturas de viviendas. 

Es evidente que su encanto no ha pasado nunca inadvertido, declarándose en el año 1935 Monumento Nacional. Hoy en día continúa siendo una parte esencial en la vida de sus habitantes, convirtiéndola en el lugar más transitado y animado de la ciudad. En torno a ella se organizan un sinfín de actividades como conciertos, mercadillos o la preparación de las famosas casetas en honor al día del libro. Pero, sin duda, su popularidad recae sobre la tradicional Nochevieja universitaria, cuyo origen se remonta a 1999. Un grupo de universitarios decidió reunirse el penúltimo jueves lectivo del mes de diciembre para poder despedirse del año con sus compañeros de clase antes de las vacaciones de Navidad. A partir de entonces, la costumbre de comer 12 gominolas, en sustitución de las clásicas uvas, se ha convertido en una enorme fiesta que cada año atrae a más gente. 

Nochevieja universitaria

En definitiva, la Plaza Mayor de Salamanca es el punto de encuentro favorito entre sus residentes, ya que son muchos los que quedan bajo la esfera de su reloj. Por ello, ¡no dudes en visitarla! Tanto de día como de noche, te cautivará con su ambiente, pues tiene muchos bares y terrazas donde pasar un buen rato con amigos y disfrutar de las vistas. Como se trata de un imprescindible, de ella surgen muchos de los free tours y visitas guiadas que recorren la ciudad.

Alumnos de Tía Tula en una visita guiada

Salidas fundamentales de la Plaza Mayor

Algunas de las zonas y calles más destacadas de la ciudad salen, como no podía ser de otra manera, de la Plaza Mayor. Dejando justo a nuestras espaldas el Ayuntamiento (la fachada principal de la Plaza, el lateral principal de mayor altura), vamos lado a lado siguiendo de izquierda a derecha el sentido de las agujas del reloj:

  • A la izquierda, el lateral de los medallones de los reyes, cuyas tres salidas cuentan con escaleras descendentes (es el lateral elevado de la Plaza). Estas salidas dan a la Plaza del Mercado y el Mercado Central de Abastos (atención a la salida central, cuyo arco cuenta por el lado exterior con una espectacular cabeza de toro), y la tercera da a la Plaza del Poeta Iglesias, recientemente remodelada (ha quedado preciosa) con un precioso monumento escultural dedicado a Alberto de Churriguera y al Conde Francos, como principales responsables del proyecto de la Plaza Mayor.
  • En frente, el lateral de los medallones de los conquistadores, con una nueva salida, la central a la Plaza del Poeta Iglesias (para embocar un poco más allá, bien a la Calle San Pablo, bien a la Rúa Mayor), y una segunda salida -fundamental para cualquier recorrido turístico- a la Plaza del Corrillo primero y Rúa Mayor después (camino después hacia las catedrales y la Universidad). Podríamos llamar a este, el lateral del Corrillo.
  • A la derecha, continuando con la salida de la Plaza del Corrillo, vendría el lateral de los medallones de figuras religiosas y del mundo de la cultura; primero, una salida hacia la Calle Prior, de gran encanto y trasiego de gente también, y después, al final, un par de salidas en forma de pasajes (lateral del Prior y los pasajes). 
  • Por último, el lateral principal, el del Ayuntamiento, que hemos dejado a nuestras espaldas, con las tres salidas a las tres calles principales de actividad comercial, en oposición a la zona antigua monumental que está del lado de enfrente (más allá del lateral del Corrillo): la Calle Concejo -la menor de las tres-, la Calle Zamora -la que hace su salida bajo el arco del Ayuntamiento-, calle larga plagada de comercios que atraviesa otra plaza fundamental y muy bonita (la Plaza de los Bandos), y la Calle Toro, también clave en cuanto a actividad comercial y que llega, un poco más allá, a la Plaza del Teatro Liceo, el teatro principal dentro de la ciudad.  

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